Mezcla la harina con el azúcar. Añade la mantequilla y empieza a amasar. Cuando la textura esté arenosa, añade la yema y 2-3 cucharadas de agua fría. Sigue amasando hasta que tengas una masa homogénea. Ahora extiende la masa. El grosor debe ser de unos 0,5 cm.
Pon un papel de horno en un molde redondo desmontable. Diámetro del molde: 23 cm. Unta la pared con mantequilla y después espolvoréala con harina. Elimina la harina sobrante. Pon la masa extendida en el molde. Haz una pared de 3 cm de altura. Pon la masa en el frigorífico durante 30 minutos.
Precalienta el horno.
Saca la masa del frigorífico y ponle otro papel de horno encima de la masa, cubriendo este papel con judías o garbanzos. Hornea la masa durante 15 minutos. Cuando la masa esté ya precocida, saca el molde del horno y quita las legumbres y el papel que protegía la masa.
Bate los 6 huevos con el azúcar hasta que la mezcla quede cremosa y espumosa. En otro bol, mezcla la ricotta con la ralladura de limón.
Ahora añade la maicena a la crema de huevos y después incorpora la ricotta. Mézclalo muy bien y vierte todo encima de la masa quebrada precocida.
Hornea el Fiadone en el horno de 50 minutos a 1 hora. Horno: 180ºC.
Al sacar el Fiadone del horno, deja que se enfríe 20 minutos en el molde y después quita el molde y pasa la tarta a una rejilla para que termine de enfriarse.