Déjate llevar por el sabor más vintage del otoño. Este bizcocho de membrillo te llenará con el sabor de esta estación, y mientras fuera ya empieza a hacer algo más de fresco, tú en tu silla favorita disfrutas de este postre dulce y jugoso. Solo te hace falta elegir si lo tomarás con una taza de té o con una taza de café caliente.
En la repostería no hay demasiadas recetas con membrillo crudo. Una fruta algo abandonada, quizá por el desconocimiento o porque a muchas personas les gusta más el dulce de membrillo o una compota de membrillo, y con esto cierran la puerta a otras recetas. ¿Alguna vez te has preguntado, estando delante del mostrador de la frutería y mirando esta fruta, cómo hacer bizcocho de membrillo? En mi blog tengo un par de recetas hechas con esta bonita fruta otoñal, descubre cuántas cosas se pueden hacer con ella.
En esta receta de bizcocho he combinado las almendras molidas y picadas con membrillos naturales. Mira las fotos, ¿te imaginas estas almendras tostadas y crujientes con el perfumado membrillo encima de la tarta?
Qué dulce es el otoño, y si le añadimos este postre, jugoso y aromático, mucho más. Uno de los motivos es gracias al clavo, que es el mejor condimento para acompañar estos postres. Un poco más abajo encontrarás la receta de este bizcocho de membrillo con almendra.
“Si tienes que madrugar, al menos reconfórtate desayunando un bizcocho tan delicioso como este”.
Receta de Bizcocho de membrillo con almendra
Ingredientes
Para el bizcocho:
- 90 g de Mantequilla pomada
- 55 g de Almendra molida
- 200 g de Harina
- 10 g de Levadura en polvo
- 2 Huevos L
- 150 g de Yogur griego
- 100 g de Azúcar
- Ralladura de medio limón
- 1 cucharada de té de clavo molido (unos 10 clavos enteros, dependiendo del tamaño)
Para cubrir el bizcocho:
- 500 g de Membrillo (ya limpio)
- 60 g de Azúcar
- 5 Clavos enteros
- 100 g de Almendra sin piel
Elaboración paso a paso
- Corta los membrillos ya limpios en gajos medianos. Yo pongo el peso de la fruta limpia, porque al eliminar la piel del membrillo, muchas veces hay que quitar bastante. Pica las almendras en trozos grandes.
- Pon agua en una cazuela. Echa dentro la fruta, los clavos y el azúcar. Cocina unos 10-15 minutos (el tiempo depende del tamaño de los gajos). La fruta tiene que estar blanda, pero ten cuidado de que no se cocine demasiado porque si no, puede deformar y romper la fruta. Deja enfriar el membrillo en el agua. Antes de ponerlo en la masa del bizcocho hay que escurrirlo.
- Precalienta el horno. Pon papel de horno en el molde (en el fondo y en la pared). También puedes untar el fondo y la pared con mantequilla y después espolvorear con harina. Elimina la harina sobrante. Diámetro del molde: 23 cm.
- Bate la mantequilla con el azúcar unos minutos hasta que esté cremosa. Añade ahora uno por uno los huevos. Sigue batiendo hasta que esté cremosa de nuevo. Incorpora ahora la ralladura de limón y el yogur.
- En otro cuenco tamiza la harina, después añade la almendra molida, la levadura en polvo y el clavo molido. Incorpora esta mezcla a la masa anterior. Sigue batiendo hasta que esté homogénea. Vierte la masa de bizcocho en el molde y alísala.
- Pon la fruta encima de la masa del bizcocho y espolvorea con las almendras picadas. Hornea durante unos 40 minutos. Horno: 180ºC. En el caso de que las almendras empiecen a tener un color oscuro, pon un papel de aluminio encima del molde y sigue horneando. Al sacar el bizcocho del horno deja que repose 5 minutos en el molde y después pásalo a una rejilla para que se enfríe.
Notas
Acerca de mí
¡Hola, soy Emese! Te doy la bienvenida a este recetario visual que intenta seguir el ritmo de las estaciones. Además de mis postres y algunas recetas con un toque vintage y acogedor, también podrás encontrar mis experiencias fotográficas. Saborea las frutas que nos ofrece la Naturaleza. ¿Empezamos?
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