Aquí tienes la receta perfecta del cheesecake japonés esponjoso, la tarta japonesa más famosa de los últimos tiempos, que a mí me funciona muy bien y no es nada complicada de hacer. Eso sí, hay algunas reglas que hay que seguir para que este pastel te salga como si fuera el original.
¿Qué es este Japanese cotton cheesecake? En realidad es un soufflé cheesecake, aunque también suelen relacionarlo con el Chiffon cake americano. Todo estos postres tienen en común que al hornearlos nos sale una tarta muy alta, ligera y con una textura muy esponjosa y llena de aire. Por esta razón, una vez sacada del horno tiembla o baila. Su textura es muy delicada y suave, al igual que los soufflés. Es como si fuera un algodón de azúcar con sabor a tarta de queso. Si necesitas una excusa para darte un homenaje, puedes también preparar y comparar la textura de la tarta de queso con chocolate blanco o el cheesecake sin horno con la de esta tarta de queso japonesa. Y aunque en ese aspecto verás una gran diferencia, la similitud está en que todas están deliciosas.
A continuación, te explicaré cómo tienes que elaborar este esponjoso cheesecake japonés y en qué te tienes que fijar para que el resultado te haga muy feliz. Porque este postre japonés único te alegra el corazón al verte capaz de hacer algo así. También alegra los estómagos, como asegura mi novio, gran experto en catar las tartas de queso en casa.
¿Cómo hornear esta famosa tarta de queso japonesa?
Vamos a ello. Para empezar, es básico que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente. Es importante hornear el postre al baño María. Como importante también es tamizar la harina y batir muy bien las claras de huevo a punto de nieve. En cuanto tengas hecha la tarta, no la saques inmediatamente del horno. Deja que repose unos minutos en el interior con la puerta algo abierta. A la hora de sacar el postre del molde, vuelca la tarta con movimientos firmes pero delicados, con el fin de conservar la altura que tiene.
En esta receta de cheesecake esponjoso cada ingrediente es específico y tiene que tener su peso exacto. En mi caso, he utilizado mascarpone y huevos de tamaño L. Particularmente, siempre uso este tamaño de huevo, pero para esta receta quiero recalcar que es el más idóneo.
Es inevitable que después de hornear este cheesecake japonés su volumen baje un poco. Mira en las fotos y verás unas arrugas. Esto es normal porque en el fondo es un soufflé. Por lo tanto, al no ser un bizcocho, lo tendrás que guardar en el frigorífico. Lo mejor de todo es que un buen cotton cheesecake guarda su textura ligera y suave durante, al menos, un par de días más.
Por lo demás, será un placer contestarte a cualquier duda que tengas sobre esta receta. Me encantará saber que has disfrutado de un cheesecake japonés esponjoso, tembloroso y casero, tanto como lo hemos hecho nosotros.
Origen de la receta: TT konyhálya.
“Dile Sayonara a los postres insípidos y aburridos con este seductor cheesecake”.
Receta de Cheesecake japonés esponjoso
Ingredientes
Para el cheesecake japonés:
- 100 ml de Leche entera
- 200 g de Queso crema mascarpone
- 60 g de Mantequilla
- 60 g de Harina
- 25 g de Maicena
- 6 Huevos a temperatura ambiente L
- 120 g de Azúcar
- La piel rallada de 1 limón o una naranja opcional
Elaboración paso a paso
- Forra un molde con papel de horno. Deja un poco más alto el papel que la altura del molde. Así evitarás que la masa se salga fuera cuando crezca durante la cocción. El molde que he usado tiene un diámetro de 20 cm y una altura de 10 cm.
- Separa los huevos y precalienta el horno.
- Pon en una cazuela la leche junto con el queso crema y la mantequilla. Caliéntalo todo hasta que la mantequilla se derrita y tengas un líquido homogéneo. ¡Ojo! Esta mezcla tiene que estar a temperatura ambiente. Si has calentado demasiado, deja enfriar un poco.
- Añade las yemas, una por una, a la mezcla anterior.
- En un cuenco aparte mezcla la harina con la maicena. Añade un poco de la mezcla anterior. Bate muy bien para que no tenga grumos. Ahora ya puedes añadir el resto de la mezcla de yemas. Lo más importante es que quede lisa.
- En otro cuenco empieza a batir las claras de huevo con una pizca de sal. Cuando empiecen a aparecer espumas blandas y frágiles añade poco a poco el azúcar. Sigue batiendo hasta que tengas una espuma firme (a punto de nieve).
- Añade en tres tandas la mezcla de las yemas a las claras. Hay que mezclar con movimientos envolventes. Las claras no pueden bajar en ningún momento.
- Vierte la masa del cheesecake japonés en el molde y alísala. Golpea el molde en la mesa para eliminar burbujas. También puedes pasar el cuchillo por dentro de la masa para eliminar aún mas burbujas.
- Este postre se hornea al baño María, por lo que pondremos el molde en el que está la masa dentro de otro molde más grande. Llena este segundo molde con agua hirviendo para que cubra unos 3 cm del molde del postre.
- Ahora hornea durante 50 minutos. Horno 150ºC. Una vez haya pasado este tiempo baja el horno a 130ºC y sigue horneando unos 15 minutos más.
- Apaga el horno y deja la puerta abierta con la ayuda de un palo o de un paño de cocina. Deja así la tarta de queso japonesa unos 20 minutos.
- Pasado este tiempo ya puedes sacar el postre del horno.
- Quita el molde y presenta tu cheesecake japonés.
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