Qué ricas son las recetas dulces italianas, como lo es este helado de stracciatella. Un popular helado vintage que gracias a sus chips de chocolate finos y crujientes, tan característicos, resulta irresistible. Si ya conoces la magia del Tiramisú o del helado de café, este postre también está para morirse.
¿Cómo preparar un helado de stracciatella cremoso?
En mi receta hago una versión hecha sin huevo, lo que significa que la preparación es más sencilla. Utilizo una mezcla de leche fresca entera y nata, y si remueves bien la crema durante su congelación, no necesitas ni heladera. Este helado casero te quedará cremoso.
En la receta te enseño cómo conseguir estas láminas crujientes de chocolate, ya que sin ellas no puede existir este postre de verdad. Es importante que las virutas se añadan al final, cuando ya tienes el helado en su punto. Con esta misma técnica puedes hacer también las largas y finas láminas de chocolate para la famosa tarta Comtessa.
No sé si lo sabes, pero existe la cuna del helado de stracciatella. Está en Italia, concretamente en Bérgamo. El pastelero Enrico Panattoni inventa este helado tan blanco e irresistible en 1961. Así que si queremos saborear la versión auténtica y que se sigue elaborando de la misma manera que cuando se creó, no nos queda otra que viajar a Bérgamo y visitar esta pastelería, La Marianna.
La otra opción para que puedas disfrutar de esta tentación es seguir leyendo y animarte a hacerla. Como el calor aprieta más y más, apetece comer estos postres frescos. Pero, curiosamente, las ganas de comer un buen chocolate no dejan de existir nunca. Este helado de stracciatella combina todo lo que necesitas en estos momentos veraniegos.
“Los helados italianos, refrescantes y deliciosos, son una garantía de éxito.”
Receta de Helado de Stracciatella
Ingredientes
- 400 ml de Leche entera
- 150 ml de Nata
- ¼ vaina de Vainilla
- 30 g de Miel
- 25 g de Azúcar
- 80 g de Chocolate negro
Elaboración paso a paso
- Calienta la leche con el azúcar, las semillas de vainilla y la vaina de vainilla. Hierve 2 minutos y deja enfriar. Después elimina la vaina de vainilla.
- Añade la miel a la leche aromatizada.
- Monta la nata. No tiene que estar muy dura. Sigue batiendo y añade poco a poco la leche infusionada. Pon esta base de helado en el congelador durante 5 horas. Cada media hora hay que batir. Yo suelo hacerlo con la batidora, de esta forma elimino bastantes cristales.
- Mientras el helado empieza a coger textura, derrite el chocolate. Después extiende el chocolate fundido muy fino en un papel de horno. Grosor: entre 0,5 mm y 1 mm. Congela el chocolate. Ahora como ya está sólido, pica el chocolate fino. Vuelve a meterlo en el congelador.
- Cuando ya tengas el helado en su punto incorpora el chocolate picado. Ya puedes comer o congelar el helado.
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