Sin duda, esta galleta al igual que las Linzer triunfan por completo en Navidad. Unos postres que duran mucho, son fáciles de hacer y le gustan a todo el mundo. Si estás pensando qué receta hacer para estas fechas, las galletas de mantequilla y almendra piden sitio en tu lista.
En España se conoce también a este postre alemán como Vanillekipferl. Aunque tengo que decir que es mucho más popular en todo el antiguo territorio del Imperio austrohúngaro. Principalmente se elabora en Navidad, pero te digo por experiencia que apetece elaborarlo también en otras épocas del año. Con una taza de té o café estas galletas de mantequilla y almendra siempre son un acierto.
¿Cómo hacer las Vanillekipferl? Se trata de una receta de galleta de vainilla muy sencilla, enriquecida con almendra molida. La masa se prepara enseguida. Su mayor atractivo es su aspecto. Una vez horneadas hay que rebozar estas medialunas como los roscos de vino, en azúcar glas. Es una receta que fácilmente puedes versionar, ya que en vez de almendra puedes usar avellana. También puedes tostar los frutos secos antes, así las medialunas quedarán mucho más sabrosas.
Ahora se me ocurre que, si te apetece regalarle dulces a alguien, estas galletas de mantequilla y almendra son ideales para eso. Solo mete las Vanillekipferl en una bonita caja metálica y ya tienes un regalo original hecho por ti. Algunas veces estas sorpresas son las mejores, porque sabes que la otra persona ha pensado en ti y ha dedicado un tiempo a elaborar este postre. ¡Qué bonito!
“Cuando mi hermana era chiquitina esta era su galleta favorita”.
Receta de Vanillekipferl
Ingredientes
- 250 g de Harina
- 200 g de Mantequilla fría
- 100 g de Azúcar glas
- 100 g de Almendra molida
- 1 vaina de semillas de vainilla
Para rebozar:
- 100 g de Azúcar glas
Elaboración paso a paso
- Mezcla las semillas de la vainilla con la harina, el azúcar glas (100 g) y la almendra molida. Añade la mantequilla y amásalo todo. Solo tardarás unos minutos. Forma una masa homogénea y colócala en el frigorífico durante al menos 1 hora.
- Precalienta el horno.
- Corta la masa en trozos y forma unos rollitos. Su grosor es más o menos como el dedo meñique y tiene unos 7-8 cm de largo. Dobla los rollitos para que tengan la forma de una medialuna. Ponlos en una placa revestida con papel de horno.
- Hornea las galletas durante unos 7-10 minutos hasta que estén ligeramente doradas. Horno: 180ºC.
- Reboza las galletas en azúcar glas. Ten cuidado porque recién sacadas del horno están todavía muy frágiles. Manipúlalas con cariño. Por último, deja que se enfríen.
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