Estás a punto de sumergirte en una deliciosa receta de verano. Este pastel de albaricoque, en versión galette, es fácil de hacer, rústico y con el dulzor natural de los albaricoques maduros.
Ya estamos en los meses calurosos, con este increíble boom de frutas que apetece comerlas todas. Este es el caso de la fruta protagonista de hoy, muy conocida pero poco empleada en este mundo, ya que mientras hacer una mermelada de melocotón o una tarta de melocotón puede ser algo habitual, el albaricoque no es una de esas frutas con las que hagamos muchos postres. Cuando notes que te sonríe desde las estanterías de las fruterías, convéncete de que ese es el mejor momento para preparar este pastel de albaricoque o un sencillo bizcocho de albaricoque.
La base es una masa de galette normal, hecha con harina, mantequilla y huevo. Debajo de esta capa de albaricoques hay una crema de frangipane de nueces muy cremosa. Este es el toque especial de esta galette.
¿Cómo hacer esta crema de nueces? La elaboración de esta crema coincide con la tradicional frangipane de almendras, pero esta vez el fruto seco que voy a utilizar es la nuez. Para molerla es suficiente con la picadora o el robot de cocina que tengas en casa. El resultado es una frangipane de nueces muy versátil que puedes utilizar en muchas recetas donde se utiliza la versión de almendras, por ejemplo, en esta tarta de cerezas inglesa.
Empieza el verano con este rico y sabroso pastel de albaricoque. Las galettes son tan rústicas como las tartas de ciruela alemanas. Creo que este aspecto hace que estas recetas nos resulten aún más deliciosas. Te aseguro que la combinación de los albaricoques con la crema de nueces es algo fantástico, y verás como no te dará pereza encender el horno.
“Cada vez que veo una galette se me hace la boca agua. Es un bocado ideal para esas mañanas en las que buscas evadirte de la realidad.”
Receta de Galette de albaricoque
Ingredientes
- ½ cucharada de té de Levadura en polvo
- 300 g de Harina
- 30 g de Azúcar
- 145 g de Mantequilla fría
- 1 Huevo L
- Ralladura de un limón
Para el Frangipane de nueces:
- 115 g de Nueces
- 45 g de Azúcar
- 50 g de Mantequilla pomada
- 1 Huevo L
- 10 g de Maicena
Para la capa de fruta:
- 650 g de Albaricoques maduros
- 10 g de Maicena
- 80 g de Azúcar
Para pincelar:
- 1 Huevo
Elaboración paso a paso
- Muele las nueces.
- Amasa la harina con el azúcar (30 g), la levadura en polvo, la ralladura de limón y la mantequilla fría. Obtendrás una masa grumosa. Añade el huevo. Forma una masa homogénea. Ponla en el frigorífico durante 1 hora (o al menos media hora).
- Al pasar este tiempo, amasa un poco la masa para que esté un pelín más blanda. Extiéndela, dale forma de círculo y un grosor de unos 4 mm. Hay que espolvorear con harina varias veces, tanto la tabla como la masa, para que no se pegue. Es una masa quebradiza. Si se te rompe, puedes arreglar las “rajas” con los dedos.
- Con la ayuda de tu rodillo, traslada la masa a una placa de horno revestida con papel de horno. Con los dedos une las partes que estén un poco rotas. No tiene que quedar perfecto, es un postre rústico y artesanal.
- Precalienta el horno.
- Elabora la crema de nueces: Bate la mantequilla con el azúcar un par de minutos. Añade la nuez molida y la maicena. Bate todo de nuevo, y por último incorpora el huevo. En un cuenco aparte, corta las frutas en gajos y mézclalas con el azúcar y la maicena.
- Extiende la crema de nueces sobre la masa, pero solo por el centro. Después cubre la crema con la fruta. Dobla los bordes de la masa hacia el interior tapando parte de los albaricoques. Con los dedos puedes presionar un poco.
- Pincela la masa con huevo batido. Hornea durante unos 45 minutos hasta que la masa tenga un color dorado.
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