Este shortbread relleno con frambuesa es un postre original y muy delicioso. Es una razón suficiente para compartirlo o regalarlo. También es un postre para llevar y quedar bien. Cualquier ocasión es buena para descubrir juntos algo nuevo, ya sea con tus amigos o tu familia.
¿Por qué hacer este postre y no unas rosquillas de anís, una Tarta Pavlova o un pastel de merengue con mermelada? Este shortbread relleno con mermelada es muy especial. Seguramente pocas personas conocen este tipo de postres. Si has probado un Gerbeaud szelet, puedes ya un poco saber qué sabor tendrá, aunque esta receta está llena de sorpresas. La base es una especie de masa quebrada y lleva un relleno de mermelada de frambuesa. Pero la gran particularidad de esta receta es que la parte superior del pastel queda cubierta con yemas y almendras. ¡Guau! Es una receta algo laboriosa, pero seguramente todo el mundo hablará de ti. Expresarse a través de la creatividad y la repostería es muy gratificante.
Este postre me devuelve a mi niñez, cuando al ir a visitar a mi abuela siempre nos ofrecía algo para merendar. Ella tenía un par de amigas y, de vez en cuando, se reunían para jugar a las cartas. Durante horas y horas charlaban, jugaban, reían… y con sus cafecitos habituales tomaban postres, siempre caseros, y este postre es uno de esos. Se podría decir que es un poco vintage, con ese toque antiguo pero atemporal, agradable y sencillo. Este tipo de postres son muy queridos en mi país, Hungría, ya que tenemos una larga tradición elaborando este tipo de shortbread relleno con mermeladas.
“Con esta receta he ganado el segundo premio en un concurso de Canal Cocina. ¡Qué ilusión que estos sabores de antaño sigan triunfando!”
Receta de Shortbread con mermelada de frambuesa
Ingredientes
- 100 g de Azúcar glas
- 200 g de Mantequilla fría
- 300 g de Harina
- 1 pizca de Clavo molido
- 1 Huevo L
- La piel rallada de 1 limón mediano
Para rellenar:
- Mermelada de frambuesa
Para la cobertura:
- 2 Yemas de huevo L
- 60 g de Azúcar glas
- 1 pizca de Semillas de vainilla
- 50 g de Almendras laminadas
Elaboración paso a paso
- Tuesta las almendras en la sartén y deja que se enfríen.
- Amasa la harina con la mantequilla, el azúcar glas, la pizca de clavo y la ralladura de la piel del limón. Obtendrás una masa arenosa. Añade el huevo y forma una masa homogénea. Reserva la masa en la nevera durante 30 minutos.
- Precalienta el horno.
- Divide la masa en 3 partes iguales. Extiende cada trozo dándole forma de un rectángulo fino, la medida es: 12 cm x 36 cm. Pincha con un tenedor las láminas en varios sitios para que no se deformen durante el horneado. Coloca las láminas en una placa revestida con papel de horno y hornéalas hasta que estén ligeramente doradas: unos 17-20 minutos. Horno: 180ºC.
- Todavía en caliente, cubre generosamente una lámina de pasta con la mermelada de frambuesa. Tapa con la segunda lámina, esparce mermelada de frambuesa otra vez y después coloca la tercera lámina encima. Deja enfriar el pastel 10 minutos.
- Mientras, bate las yemas, el azúcar glas y la pizca de vainilla hasta que tengas una crema blanquecina y cremosa (unos 5-6 minutos). Cubre con esta crema de yemas el pastel. Espolvoréalo con las almendras laminadas.
- Vuelve a colocar el pastel en el horno durante 10 minutos hasta que la crema se seque. El horno tiene que estar templado. Horno: 110ºC. Por último, deja enfriar el shortbread y espera al día siguiente para cortarlo.
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